lunes, 9 de enero de 2012

TRANSMUTARME



El eterno deseo de transmutarme en aquello que creo que seré, pero que me da miedo averiguar que quizás sea producto de mis delirios de grandeza, me golpea con fuerza días como hoy. Días después de hacer y desarrollar con capacidad el enriquecimiento emocional de otros/as.

Puedo comprender que si una oruga tiene miedo al capullo, nunca pasará a ser mariposa. Por otro lado, sería fatal para una lombriz averiguar que no es una oruga y por tanto no dará paso a esa crisálida anhelada.

Pasados los tiempos, tengo un regustillo a fraude propio; o... miedo.

Puede que deba reflexionar menos y hacer más, un clásico donde los haya.